La jornada de elecciones judiciales celebrada este domingo en Bolivia estuvo marcada por un despliegue policial significativo y una serie de operativos para garantizar el cumplimiento del auto de buen gobierno.

Según informó el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, la jornada transcurrió de manera “tranquila”, aunque no estuvo exenta de incidentes.

Durante los controles realizados a lo largo del día, se clausuraron 43 bares que incumplieron la prohibición de venta y consumo de bebidas alcohólicas.

Además, 368 vehículos, entre motocicletas y automóviles, fueron detenidos por circular sin la autorización correspondiente.

“Se informa al pueblo boliviano que, en esta jornada electoral, se desplegaron más de 21.000 efectivos policiales en todo el país”, detalló Del Castillo a través de sus redes sociales.

Los operativos también resultaron en el arresto de 722 personas y la aprehensión de tres individuos por diversas irregularidades.

El cumplimiento del auto de buen gobierno fue clave durante el proceso electoral. Este conjunto de medidas incluyó la prohibición de circulación vehicular sin permisos y la restricción del consumo de bebidas alcohólicas, entre otras disposiciones.

Sin embargo, varios casos de incumplimiento fueron detectados, destacándose 16 casos de uso de permisos de circulación falsificados en el departamento de La Paz, según informó el fiscal departamental, Luis Torrez.

Pese a los incidentes, el ministro Del Castillo destacó el compromiso ciudadano. “En resumen, fue una jornada tranquila que demostró el compromiso de la ciudadanía con la democracia”, afirmó.

Asimismo, se reportaron 85 casos en los que personas fueron auxiliadas ante emergencias diversas, gracias al despliegue del personal policial.

Concluido el horario de votación, comenzó el escrutinio de votos, cuyo resultado definirá a las nuevas autoridades judiciales electas por el pueblo boliviano.

Este proceso refuerza el esfuerzo por garantizar la participación ciudadana en un marco de orden y seguridad.

La jornada fue un reflejo del compromiso de las autoridades y de la población en un proceso clave para el fortalecimiento de la democracia en Bolivia.