La disputa mediática entre el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, y el expresidente Evo Morales, alcanza un nuevo pico después de los recientes acontecimientos en torno al asesinato de un policía en un operativo antidrogas en Santa Cruz.

En respuesta a las críticas de Morales, quien cuestionó la desaparición temporal del ministro Del Castillo y señaló errores en la información proporcionada sobre la aprehensión de un supuesto "autor intelectual" del crimen, el ministro afirmó que el expresidente ha tratado a Bolivia de manera similar a como trató a sus propios hijos.

"Lamentablemente, el señor Evo Morales ha tratado a la patria, ha tratado a Bolivia, como ha tratado a sus hijos: los abandonó cuando más lo necesitaban y una vez solucionaron sus problemas, se quiere hacer cargo, eso es inadmisible para todo el pueblo boliviano", declaró Del Castillo.

El ministro también desmintió las acusaciones de desaparición, aclarando que se encontraba en Brasil, donde se firmó un convenio con el Ministerio de Justicia para intercambiar información de manera eficiente y oportuna. Subrayó la importancia de la colaboración regional en la lucha contra el narcotráfico, detallando encuentros con ministros de Mercosur y la firma de un tratado para regionalizar el trabajo policial en la región.

La relación entre Del Castillo y Morales ha sido marcada por constantes críticas del expresidente hacia el ministro, quien figura entre los funcionarios del gobierno de Luis Arce que están bajo la lupa de Morales.